Quantcast
Channel: Revista Interviu
Viewing all articles
Browse latest Browse all 4309

Normalidad y sobrenormalidad

$
0
0

Lunes. En la peluquería, mientras me lavaban la cabeza, me dormí unos segundos y al abrir los ojos se había desatado una discusión sobre la realidad. La peluquera me dijo al oído que un cliente, profesor de Filosofía jubilado, había planteado la cuestión y todo el mundo había entrado al trapo. El chico que barría los pelos, mezclando los de las cabezas de unos con los de las cabezas de los otros, entró en el DRAE a través del móvil y leyó en voz alta: “Realidad: existencia real y efectiva de algo”. Percibí una decepción colectiva. Habíamos pensado que la realidad era algo enorme, que palpitaba como el corazón de un gigante fuera de aquellas cuatro paredes, y resultaba que la realidad era un peine, un cepillo, un frasco de laca, un secador, un mechón de tu cabello. –La realidad es todo lo que vemos –afirmó el filósofo jubilado intentando salvar la situación.–¿Y lo que no vemos qué es? –preguntó la chica que había empezado a meter la tijera en mi cabeza.–Lo que no vemos también es la realidad –respondió el profesor–. Que yo no vea tus pensamientos no quiere decir que no sean reales.–En todo caso –afirmó un cliente–, serán realidades diferentes. No es lo mismo la realidad mental que la realidad política.–De política no se habla –intervino, ceñudo, el encargado.–Quien dice la realidad política, dice la económica –respondió el tipo que había planteado la cuestión.–La realidad económica es política –sentenció el profesor.–Entonces, prohibida también la realidad económica. Y, por extensión, la realidad griega –terció de nuevo el encargado.La peluquera que se ocupaba de mi cabeza me lanzó a través del espejo un guiño de complicidad. Luego se inclinó y me dijo al oído que el jefe era un carca.Hubo otro silencio durante el que volví a dormirme (no había pegado ojo en toda la noche, por el calor) y al despertar, segundos después, nadie hablaba con nadie. Le pregunté a la peluquera qué había ocurrido.–¿Qué ha ocurrido de qué? –dijo ella.–De la discusión sobre la realidad –dije yo.Me miró raro y comprendí que todo había sido un sueño.Martes. Yo estoy aquí como persona normal, incluso sobrenormal, haciendo cola en un establecimiento de Loterías y Apuestas del Estado. Repito: Loterías y Apuestas del Estado. De súbito, le viene a uno a la cabeza que el Estado debería tener, pongamos por caso, una red eléctrica o de gas, no sé, que el Estado tendría que ser el dueño de la luz, que nos sale por un ojo de la cara, y que sin embargo está privatizada. Pues nada de eso, al Estado lo que le gustan son las loterías y apuestas. Vale, aceptémoslo como personas normales o sobrenormales que somos por voluntad propia. Estoy aquí, repito, haciendo cola para que me den el papelito del Euromillón, que nunca toca, pero al mismo tiempo soy ese tipo que recorre la Gran Vía con una pistola de pequeño calibre en el bolsillo. Sus balas son como el escupitajo de un tuberculoso delgado. Apenas tienen fuerza para romper el cráneo, por eso hay que disparar al ojo, una zona blanda desde la que resulta fácil acceder al cerebro. Ese tipo soy yo. Quiero matar a alguien. Voy a matarlo, de modo que entro en una cafetería y observo al personal para seleccionar a la víctima. Le dispararé en el ojo izquierdo, antes de que le dé tiempo a cerrar el párpado. Luego, como en El Padrino, me desprenderé de la pistola y saldré sin prisas del establecimiento. Cuando estoy sacando la pistola del bolsillo, me llega la vez en la ventanilla de Loterías y Apuestas del Estado y la visión desaparece.–¿Qué desea? –me pregunta la empleada estatal.–No sé. ¿Dónde hay más pasta esta semana?–En el Euromillón. –Pues póngame siete euromillones. Mejor diez, póngame diez.
Miércoles. Un famoso escritor asegura en una entrevista que está intentando escribir una novela imperfecta, porque de las perfectas está hasta los cojones. Literal. La frase, que a primera vista parece una mera provocación, contiene un grado de verdad insoportable. Una verdad, para decirlo todo, cuidadosamente envuelta en una mentira.

Descarga la revista en PDF. 


Viewing all articles
Browse latest Browse all 4309

Trending Articles