En cuatro reuniones sucesivas, mossos d’esquadra de diversos puntos de Cataluña preguntaron a sus mandos por las instrucciones que la Fiscalía de la Audiencia Nacional ha dado a todos los cuerpos policiales con presencia en el principado, y en las cuatro la respuesta fue la misma: “No sabemos nada; no hay ninguna directiva”. Los agentes querían saber a qué atenerse ante la orden de Fiscalía de hacer atestados urgentes en caso de “existencia o conocimiento” de delitos de sedición o rebelión, o “conspiración, proposición y provocación” para cometerlos. Pero nada decía su director general, el exsocialista Albert Batlle, ni obtenían respuesta en los briefings (así llaman los mossos a las reuniones preparatorias del trabajo) matinales y nocturnos de los pasados martes, miércoles y jueves. Y la inquietud en las comisarías fue haciéndose tal que, en la tarde del jueves, Josep Lluís Trapero Álvarez, comisario jefe del cuerpo, tuvo que hablar “a tots els serveis”.
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