Ya podrá hacer toples sin miedo a paparazzis…
Solo me han pillado una vez; estaba haciendo la friki con dos conchitas en los pezones creyéndome la Sirenita… ¡Un cuadro!
¿Es usted muy friki?
Mucho. Y me enorgullezco, lo llevo por bandera. Tengo a quien parecerme, mi padre es muy friki, siempre haciendo chistes. Acabo de hacer un curso de clown, ¡lo que me faltaba para ser una payasa! Me encanta que se rían conmigo.
Sabemos muy poco de su vida privada…
¡Ni ganas! (risas). Estoy a la espera de encontrar mi compañero de vida. No soy de gastar mi energía en pasar una noche con alguien.
¿Y qué tiene que tener ese galán?
Que sea inteligente. ¡Por favor! (risas), que tenga mucho humor y que, cuando me mire, sepa que no va a encontrar a nadie como yo.
¿Es usted una actriz modelo que presenta, una modelo de presentadora que actúa…?
Soy actriz desde los dos años que estuve en una escuela gracias a mi tía [la bailaora Cristina Hoyos], que vio la artista que había en mí. Ella quería que estudiara para soprano, pero yo prefería cantar a Madonna o Michael Jackson. Luego se me puso esta voz de pescaíto frito y lo dejé, aunque hace unos años canté ‘Fever’ en teatro y no quedó mal.
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