CON LO QUE despotrica Pablo Iglesias y su gente contra la casta y el espíritu del 78, pero entonces éramos bastante más nobles y exigentes. Ahora hay un ministro del Interior que habla de las peculiaridades de la Fiscalía afinando causas, y no pasa nada. La misma Fiscalía afina las acusaciones contra un presidente autonómico, y no pasa nada. El ministro de Justicia jura por que a la oposición le crezca la cabeza que no conoce de nada al fiscal general del Estado, y no pasa nada. Imputan al gobernador del Banco de España, y el que lo nombró ni está ni se le espera… Miren todos, los actores con caspa y los de la nueva política: es cierto que en la Transición nos tragamos muchas y que dejamos a la gente enterrada en las cunetas, pero este cachondeo que hay ahora, ni de coña. Entonces no permitíamos el “no sé nada, yo pasaba por aquí”. | Sigue leyendo.