
Director: Lars von Trier.
Producción: Louise Vesth, Marie Cecilie Gade, Bert Hamelink, Marianne Slot.
Guión: Lars von Trier.
Intérpretes: Charlotte Gainsbourg, Stacy Martin, Stellan Skarsgård.
El estreno del Volumen 2 completa las cuatro horas de esta versión reducida –el montaje original es de cinco y media– de Nymphomaniac, la última apuesta del siempre arriesgado y provocativo Lars von Trier. A lo largo del metraje, Joe cuenta su vida a Seligman, un desconocido que la acoge en su casa cuando se la ha encontrado tirada en la calle, brutalmente golpeada. Joe se reconoce ninfómana y se inculpa por lo que considera una depravación y unas actitudes desordenadas pero que no puede reprimir: solo en la relación sexual continua y con distintas personas encuentra la posibilidad de satisfacción a su constante deseo. Y el paciente y bienintencionado Seligman se las ingenia para disculparla, estableciendo con su proceder similitudes, metáforas y equivalencias de todo tipo: matemáticas, literarias, artísticas y hasta teológicas.
Ello no impide, por supuesto, que Von Trier ilustre el relato de la mujer con imágenes explícitas de sus actividades amatorias: desde que decide voluntariamente acabar con su virginidad hasta que prueba todas las variantes de la dominación y el dolor. ¿Pornografía? Más bien anatomía… de la intimidad.