Ha sentado muy mal en Ferraz la salida del líder socialista madrileño, Tomás Gómez, aprovechando la polémica suscitada por el PSdeG para declararse a favor de las primarias en la elección de secretario general, “cuando hace un año él fue reelegido al frente del PSM y no las convocó, ni pidió hacerlas. Hubo un congreso regional en Madrid y así le reeligieron”, recuerdan fuentes de la dirección federal del PSOE.
A las mismas fuentes ha sorprendido la posición de otro apoyo de Carme Chacón en el congreso de Sevilla, el exministro Francisco Caamaño, uno de los posibles aspirantes a liderar el PSdeG. Caamaño ha dicho que primero es la democracia y luego las leyes. En Ferraz no dan crédito a que esas palabras las haya pronunciado un exministro de Justicia.
En la sede central socialista esperan una inminente propuesta formal, y por escrito, de los socialistas gallegos. En el entorno de Rubalcaba explican que su intención es ser receptivo, dialogar con el PSdeG, no dar portazos, pero sin olvidar que los estatutos del PSOE obligan a elegir a los secretarios generales en congreso, y no en primarias.
En Galicia, la dirección de Vigo –un tercio de la fuerza del PSdeG– se muestra contraria a prolongar la polémica, para no dar la impresión de división interna.